Los retos de los matrimonios durante el COVID-19
Hace algunas semanas, les escribí de como tener espiritualidad en nuestros matrimonios y como traer a Dios en el centro de nuestra relación. También les compartí que el amar a tu pareja y el querer tener una relación duradera a largo plazo, es una decisión.
Solo por el hecho que tomemos esta decisión, no significa que nuestro matrimonio será fácil ni perfecto. Todos experimentaremos retos, problemas y situaciones difíciles, que seguramente nos harán cuestionar nuestras bases, esencia y unidad como pareja. Estos retos se podrán presentar de muchas formas y venir de lugares diversos. Algunos ejemplos de estos retos pueden ser: enfermedades, pérdida del trabajo, pérdida de un ser querido, infidelidad, enojo, peleas, problemas con algún hijo o miembro de la familia, falta de dinero, o bien puede ser algún evento o situación externa tal y como lo que estamos viviendo con COVID-19. La clave al enfrentar dichos retos, es qué hacemos como pareja para analizar, entender y salir de dicha situación juntos, y con la intención de salir más fortalecidos, unidos y con crecimiento como matrimonio.
Analicemos la reciente situación de COVID-19 donde todos hemos experimentado lo desconocido y muchos nos hemos visto forzados a cambiar nuestros hábitos, al quedarnos en casa por un período largo de tiempo. Muchos de nosotros no estábamos preparados para una situación así y por lo mismo hemos sufrido un nivel alto de estrés en nuestras relaciones.
- La cuarentena representó un cambio de hábitos para casi todos nosotros. Los cambios en general no son fáciles y nos obligan a adaptarnos a nuevas circunstancias y a adoptar roles y patrones nuevos de comportamiento. Durante la pandemia muchos experimentamos cambios, y hemos tenido que trabajar desde casa, ser maestros de nuestros hijos, dejar de viajar, compartir las labores y responsabilidades domésticas, así como cambiar nuestra forma de vida. Todas estas circunstancias pudieron impactar de manera importante la estabilidad de la pareja.
- Todo cambio puede generar estrés, y si no manejamos el estrés de manera adecuada, éste puede impactar nuestra relación. ¿Por qué nos estresamos? básicamente por la incertidumbre y el posible impacto a nuestra forma de vida y a nuestra estabilidad. Por ejemplo, en la pandemia, no sabíamos que tan grave sería el virus y como nos iría si nos infectábamos, si podríamos perder el trabajo, si nuestra economía sería afectada, cuanto tiempo nos quedaríamos en casa, y muchas otras preguntas que nos preocuparon y nos generaron estrés y potencialmente impactaron la fortaleza de la relación.
- También, durante la pandemia, todos sufrimos pérdidas y dichas pérdidas generaron problemas y estrés. Muchos perdimos nuestra libertad y nuestro tiempo como individuos. El atender adecuadamente esas pérdidas es muy importante para seguir creciendo en nuestra relación de pareja.
¿Ahora, como enfrentamos esos cambios, el estrés y la pérdida? Juntos y como un solo cuerpo. Muchas veces, nos olvidamos que en una relación, somos dos personas y siempre debemos considerar la perspectiva de nuestro cónyuge. Generalmente tenemos opiniones y visiones diferentes y ambas deben ser consideradas al enfrentar un problema. Los hombres y las mujeres sentimos y expresamos de diferente manera. Cada uno de nosotros viene de familias y experiencias diferentes, y por lo mismo, enfrentamos los retos de manera diferente. Por lo mismo, siempre debemos considerar la opinión, expectativa y perspectiva de nuestra pareja, cuando tratamos de resolver situaciones difíciles y de estrés. Para ser exitosos como matrimonio, debemos tener una perspectiva balanceada y de unidad.
Cuando enfrentamos retos, cada cónyuge experimentará sentimientos diferentes y emociones fuertes. Estos sentimientos y emociones, no son buenos ni malos; lo que realmente importa es que hacemos con dichos sentimientos. Por lo mismo, la comunicación y el dialogo, se vuelven las herramientas más importantes de la pareja. Aunque el comunicarse puede parecer a la misma vez sencillo y complicado, es clave para encontrar soluciones, alternativas y diferentes formas de crecer como pareja.
Mi esposa Martha y yo, tenemos 26 años de casados, y tenemos un muy buen y sólido matrimonio. Sin embargo, el enfrentar la cuarentena no nos ha sido fácil y hemos tenido que adaptarnos continuamente a situaciones nuevas y diferentes. Hemos tenido que cambiar, y esa adaptación no ha sido fácil para ambos y nos ha tomado tiempo, dedicación, esfuerzo y mucho diálogo.
Hoy los invito a que vean los retos como oportunidades de crecimiento. Nunca nos olvidemos, que Dios siempre estará a nuestro lado para resolver situaciones difíciles. Dios permite que vivamos retos por una simple razón: el hacernos fuertes y mejores.
Todos enfrentaremos retos en nuestras vidas y relaciones. Sin embargo: los retos no deben definirnos como pareja; el cómo enfrentamos los retos debe ser lo que nos defina.
Genaro Poulat was born into a Catholic family in Mexico City where he lived for the early part of his life. He lives now in Key Biscayne, Florida with his wife Martha, to whom he has been married for 26 years. He has been blessed and fortunate to have 4 kids: Genaro, Daniela, Bernardo and Andres. Over the past 26 years he has lived in Edinburgh, Mexico, New York, Panama and Florida.
Genaro is an International Banker and he has worked in the sector for 28 years. Over the past five years, together with his wife Martha, he has been dedicated to supporting married couples and helping them to get closer to God. Genaro is an active volunteer in his Church and supports many ministries.