Jesús, en Ti Confío: Lo que Christy me Enseñó
En los últimos momentos de vida de mi hija Christina, Dios me transmitió un mensaje a través de ella, que sigue resonando en mi corazón hasta el día de hoy. Todo comenzó en 2012, cuando Christy recibió su diagnóstico de cáncer y le regalaron una estampa de la Divina Misericordia con el texto “Jesús, en Ti confío“. Ese pequeño regalo se convirtió en su fuerza diaria y, con el tiempo, en la inspiración para nuestra familia y para miles de personas que seguían sus publicaciones en Facebook durante sus cinco años de lucha.
Para Christy, decir “Jesús, en Ti confío” no era solo una frase o un mantra; era la certeza de que, a pesar del dolor y la incertidumbre, Dios tenía un plan perfecto para ella. Aceptó su enfermedad con entrega total, abrazando la cruz de su cáncer sin cuestionarla. Como madre, ver esa confianza plena me enseñó a mirar más allá del miedo y acercarme a la Divina Misericordia, profundizando en las promesas que Jesús le hizo a Sor Faustina: que quienes confían y oran la novena reciben su amor y su gracia, incluso en los momentos más difíciles.
En los instantes más desafiantes de mi vida, cierro los ojos y, como Christy, abro los ojos del alma para repetir desde lo más profundo: “Jesús, en Ti confío”. Recuerdo cómo su devoción era tan intensa que un día me preguntó la hora exacta de su nacimiento, 3:40 p.m., para descubrir si había llegado al mundo dentro de la hora de la misericordia. Su emoción fue tan profunda que yo apenas podía comprender lo importante que era para ella esa conexión directa con Jesús.
Uno de los momentos más profundos de mi vida ocurrió durante los últimos minutos de vida de Christy. Mientras rezaba por primera vez la novena a la Divina Misericordia en la madrugada, le decía que Dios la esperaba, que podía ir tranquila a sus brazos y que yo estaría bien. Ella abrió sus ojos y me miró con una paz que traspasaba todo, transmitiéndome en cuestión de segundos un amor que solo puede venir del cielo. Luego los cerró, y en ese instante comprendí que había cumplido su misión: acercar a miles de corazones a Dios y enseñar con su vida la fuerza de la fe y la entrega total… También comprendí que mi misión apenas comenzaba…
El legado más grande que Christy me dejó es decir “Jesús, en Ti confío”. Esa confianza que nos recuerda que Dios tiene un plan para cada uno de nosotros y que, al abrir nuestro corazón a su voluntad, su amor y misericordia pueden llegar a otros. Esa enseñanza no solo transformó mi vida, sino también la de quienes seguimos el ejemplo de Christy y nos inspiramos en su devoción a la Divina Misericordia.
Hoy, a través de Build the Faith, la organización que Christy cofundó, continuamos transmitiendo ese mensaje. Cada proyecto, desde la construcción de iglesias hasta la creación de espacios de oración y retiro, se realiza guiado por la voluntad de Dios, buscando tocar vidas y fortalecer la fe de familias en todo el mundo. La labor de Build the Faith refleja el amor de Dios y la enseñanza de Christy: cuando confiamos plenamente en Jesús, su misericordia transforma nuestro dolor en esperanza y nos guía para impactar a quienes nos rodean.
Decir “Jesús, en Ti confío” para mí significa abrir mi corazón cada día, aceptar el plan de Dios incluso cuando no lo entiendo, y confiar plenamente en que su amor me sostiene en todo momento. Significa que, incluso en medio del dolor, puedo encontrar paz, fortaleza y dirección. Es la fuerza que me permite seguir adelante, transformar mi propio corazón y, a través de mi vida y mi trabajo, tocar la vida de otros con amor y misericordia. Para mí, esa frase es más que fe; es la certeza de que Dios actúa siempre con amor y propósito, y que cada paso que doy guiada por Él tiene un significado profundo.
Gracias, Christy, por tu amor, tu fe y por mostrarnos el rostro de Jesús. Jesús, en Ti confío.

Monica Lacouture was born and raised in Colombia, South America. She moved to the United States in 1995, where she and her husband, Fernando, married and were blessed with three children—Daniel, David, and Christina, whose unwavering faith became the inspiration behind Build the Faith.
Although raised Catholic and educated in parochial schools, Monica describes much of her adult life as that of a “lukewarm” Catholic. That changed unexpectedly in late 2012 when she attended a retreat and had a profound personal encounter with Jesus. She had no idea at the time how much she would come to rely on this renewed faith just three months later, when her daughter Christina was diagnosed with terminal cancer.
Throughout Christina’s battle, Monica’s faith deepened, sustained by her daughter’s extraordinary trust in Jesus. In 2016, inspired by Christina’s unwavering faith, Monica and Fernando founded Build the Faith. As President of the organization, Monica feels blessed to carry forward Christina’s legacy, spreading faith and hope to others.