¿Quién Dices Tú Que Yo Soy?

Este fué el tema de una conferencia Católica que atendí recientemente. Parece llevar a una simple respuesta pero también merece oración profunda y contemplación, especialmente en el mundo de hoy. El conferencista nos pidió que reflexionáramos sobre esta pregunta e indicó que muchos ven a Jesús como una personalidad, pero no como una persona viviente en la actualidad. Mientras yo oraba y reflexionaba sobre esto, teniendo en cuenta las cosas que ocurren en nuestro mundo de hoy, no pude evitar recordar que el demonio busca dividir pero nuestro Dios viviente busca comunión con nosotros. Parece que estamos siendo saturados con argumentos, división y discordia, sea sobre política, el coronavirus, máscaras, vacunas y mandatos. Mis amigos, no olvidemos que hay mucho más en ésta vida que lo que nos pueda dividir. Permitámosnos recordar que, primero que todo, nuestras vidas deberían dirigirse hacia el Reino del Cielo de Dios.

Ultimamente, una frase vuelve repetidamente a mis oraciones, “Debemos hablar sobre Jesús!!!” He caído en cuenta que ésto es un llamado y misión enviados por Dios para estos tiempos. Hay una urgencia en este llamado, y por eso no lo tomo ligeramente. Me ha llevado a reflexionar y a preguntarme a mí misma: Quién dices tú que Yo Soy? Por qué no charlamos sobre Jesús más a menudo? Es Jesús la primera persona a quien acudimos o es El nuestro último recurso? Sí invitamos a otros a conocer a esta Persona, Aquél a quien llamamos Salvador y Amigo? Sí creemos en realidad que El es El Camino, La Verdad y La Vida? Creemos de verdad que El es el remedio para TODAS nuestras aflicciones? Si tu respuesta es “Sí!” entonces nosotros, los bautizados, tenemos una obligación y responsabilidad sagradas para predicar desde los techos que Jesús, nuestro Señor y Salvador, está Vivo! Por favor no dejen que los Obispos, Sacerdotes y Religiosos levanten toda esa carga pesada. Nosotros los laicos, debemos pronunciar su Nombre Sagrado en un mundo que desesperadamente necesita conocer al Rey de Reyes!

Los reto a cada uno de ustedes a que, en oración y con honestidad, desde la profundidad de sus corazones, contesten esta pregunta: “Quien dices tú que Yo Soy?” Es Jesús más una personalidad en un libro o una película, o es El realmente el Unico, enviado por Dios Padre, el remedio para toda la división y la destrucción? Dios ha puesto personas en nuestras vidas por una razón. Si Dios te dió el regalo de la fe, entonces por su gloria y la gloria del Reino, compártela con otros! Habla sobre Jesús. Tráelo hasta la plaza principal y cuéntale a otros sobre El! Sé testigo de nuestro Dios viviente, la Persona de Jesús, quien de forma callada y humilde camina entre nosotros, pero es tan a menudo olvidado!

Una de mis amigas más queridas, quien realmente ama a Jesús, evangeliza por todas partes donde va, con sus palabras y sus actos. Incluso mientras su esposo, en hospicio, yacía agonizando en el cuarto de al lado, ella estaba evangelizando al adolescente mensajero que había tocado la puerta. Las conversaciones a menudo empiezan simples pero son casi siempres inyectadas con humor cuando ella usa su maravilloso regalo, dado a ella por Dios, para hacer a otros sonreír!

Esta simple conversación frecuentemente lleva a que la otra persona se despida con un crucifijo, una tarjeta de oraciones, o una medalla sagrada en sus manos, y siempre con la promesa que por ellos se elevarán plegarias al cielo. La evangelización no necesita de un grado de PhD o alguna fórmula mágica, sólamente requiere amor, amor por Jesús y amor por el prójimo, y ocasionalmente un poquito de coraje. Otro amigo querido dice a menudo: “Satán conoce nuestros nombres pero nos llama por nuestros pecados. Jesús conoce nuestros pecados y nos llama amigos.” Mis amigos, apaguen las noticias que causan división y discordia y ríndanse ante Aquél quien simplemente nos invita a Confiar en El. ” Sea tu misericordia, oh Señor, sobre nosotros, según esperamos en ti.”. Psalmo 33.