Enfrentando La Tormenta

En medio de la tormenta, es natural para nosotros rezar para recibir fuerza y poder dirigir nuestra barca, para buscar la forma de entender, encontrar esperanza y encontrar un faro de luz que nos pueda guiar. Con nuestros ojos bien abiertos, buscamos algo en que podamos fijar nuestra confianza y esperanza, para no sucumbir ante la tempestad.

Pero el faro de luz ya está disponible a nosotros, tan cerca que no lo podemos ver. Es la luz de Jesús dentro de nosotros que nos da la calma, el coraje, la serenidad y la perseverancia para mantener nuestra esperanza a flote, nuestras manos en el timón de nuestro destino, nuestra apreciación por la magia del tiempo presente y lo que nos brinda. Mientras somos los capitanes de nuestra trayectoria en la vida con el regalo del libre albedrío, Jesús es el capitán de nuestras almas.

Cristina mi hija me enseñó que uno puede luchar contra las peores tormentas con simplemente decir “Jesús en tí confío.” Ella murió a la edad de 11 años después de luchar contra el cáncer por 5 años, pero siempre tuvo la luz dentro de ella que la impulsó a vivir el presente, siempre feliz, haciendo amigos, bailando y cantando, disfrutando el regalo de la vida. Vivió una vida hermosa porque aprecio en plenitud el regalo del Creador. Nos enseñó que podemos cargar una cruz, y al hacerlo, llegar más cerca a Jesús en la cruz. El ofrecer nuestras faltas, sufrimientos y ansiedades a Jesús en la cruz, su instrumento de salvación, le dió paz y alegría. Ella transformó su sufrimiento en una maravillosa fundación para ayudar a los más pobres de los pobres: Build the Faith (Edificando La Fe) es el nombre de la fundación que Cristy inspiró. Esta fundación construye la fe físicamente al ayudar a construir iglesias en áreas pobres del mundo, y espiritualmente, al atraer almas a Dios a través de retiros espirituales y otros medios. Build the Faith ha construido ya una iglesia en Garagoa, Colombia, un convento en Jose C. Paz, Argentina, y una iglesia en Diriamba, Nicaragua. Su próximo proyecto, que ya empezó, es la construcción de una iglesia en Keniago, Africa.

La enseñanza aquí es que a través del sufrimiento, nuestra alma es forjada, y cosas buenas aparecen, igual que con Jesús en el calvario, y después su resurrección. Una pequeña niña transformó su enfermedad en un rayo de luz para ayudar a otros a ser felices, disfrutar el presente, acercarse a Jesús en la Eucaristía, y mejorar al mundo.

En medio de la pandemia, también podemos transformar nuestra ansiedad y desesperación en algo bueno para la humanidad. Esta crisis ayuda a la gente a sacar lo mejor de sí, creciendo y floreciendo, al amar al prójimo, actuar sobre los deseos más nobles, y proteger a los más vulnerables. Es la mejor oportunidad, tal vez la oportunidad de nuestras vidas, de tomar el tiempo para reflexionar sobre lo que es más valioso para nosotros, cómo debemos llenar los vacíos en el amor que otorgamos a otros, que tan serios somos en perdonar a aquellos que nos han fallado, y más importante aún, cómo y que tan frecuentemente nos comunicamos con nuestro Padre en el cielo. Sigamos el consejo de Cristy para alcanzar la felicidad en medio de la tormenta, diciendo cada día “Jesús en tí confío!!!”